José Luis Borgues

Un intento por seguir la vida y obra de mi padre, no el biológico, sino quien me dio vida, el Presidente de México, Vicente Fox Quesada; ese ilustre gobernante, que con poco esfuerzo (y poco cerebro) ha metido en un sinfín de líos a toda una nación.

lunes, agosto 21, 2006

La Revolución Mexicana 2


Pues tal parece que no hay ni para cuándo se solucione este conflicto postelectoral que nos ha dejado en la completa incertidumbre (porque, digan lo que digan, aunque Felipillo sea proclamado presidente, no es seguro que dure mucho, incluso, siquiera llegue al cargo. Cada vez se habla con más encono y antagonismo. Un Manuel Espino afirmando que la derrota del PRD es un asunto de seguridad nacional; un López Obrador que acusa de fraude y soborno a los magistrados o mejor dicho, a medio México. Empresarios y grupos conservadores que exigen el uso de la fuerza bruta; los seguidores de la coalición que aprovechan hasta las misas en la Catedral para exigir el voto por voto. Ciertamente, parece que vamos a tocar fondo. Resulta que Lopez Obrador dio una entrevista al diario británico Financial Times, ese mismo periódico que en los últimos tres años se ha encargado de destapar el cochinero de influyentismo de mis hermanastros, los hijos de Martita. Según el diario, el Peje advierte que llevará la resistencia civil hasta sus últimas consecuencias; deja en claro que históricamente, en México los cambios de fondo se han gestado desde las calles; y vas más allá, pues todoo su movimiento lo resume en cuatro palabras "México necesita una revolución".



La verdad, cuando leí acerca de la entrevista, no podía creer que andrés Manuel utilizar términos tam fuertes, por eso decidí acudir a la fuete directa para que todas y todos podamos sacar nustras propias conclusiones, y si quieren, chequen a AMLO en entrevista con el Financial Times

¿En qué va a terminar todo esto? Quién sabe. Cada vez quyeda más claro que sí era, no sólo necesario, sino saludable el conteo de todos los votos; también era indispensable sacarle el firme compromiso al Sr. López de aceptar los resultados del eventual recuento. Al final, el único que saldrá aliviado de este conflicto será mi padre, porque a final d ecuentas, él ya se va. Claro, Vicente va a tener el peor día de su vida el 1 de septiembre y vivirá en el limbo político hasta el 1 de diciembre, pero una vez que entregue el poder, tal vez nunca vuelva a salir del Rancho San Cristóbal; vivirá del recuerdo agridulce de lo que fue su periodo de gobierno