José Luis Borgues

Un intento por seguir la vida y obra de mi padre, no el biológico, sino quien me dio vida, el Presidente de México, Vicente Fox Quesada; ese ilustre gobernante, que con poco esfuerzo (y poco cerebro) ha metido en un sinfín de líos a toda una nación.

lunes, noviembre 27, 2006

Oaxaca: segundo round


Esa es la pregunta: ¿cuál estado de derecho? sólo hay qué ir a Oaxaca para que hasta el más ingenuo de los tontos se dé cuenta de que no hay orden ni gobernabilidad. Una ciudad tomada no por APPOS ni PEFEPOS, sino por un estado de total caos, desorden y voluntad total para empeorar las cosas. Un fin de semana que para mal, será recordado por todas y todos las y los oaxaqueños; días largos y de angustia, guerra "light", jodidos contra jodidos, perros devorando a otros perros, eso es la batalla de Oaxaca.




Y de veras que ni a quién irle, porque ambos bandos estuvieron a poco de cobrar víctimas. De todas maneras ahí queda la frialdad de los daños materiales y los más de 140 detenidos, que ahora resulta, que debido a su "alta peligrosidad", fueron enviados hasta Nayarit, donde seguramente no habrá abogados ni testigos que puedan defenderlos, pero eso sí, sus casos continuarán de oficio, a miles de kilómetros de donde cometieron los crímenes de los que los acusan.

Y la APPO queda cada vez más arrinconadoy sin más alternativa que mantenerse en pie de lucha y a ver si por lo menos pueden descalabrar a más PEFEPOS. A estas alturas es más que evidente la separación de los profes a todo este conflicto; como ha ocurrido desde hace décadas, los maestros quedaron con el rabo entre las patas y aceptaron al final, el aumento de hambre y humillación que Ulises les aventó cual si fueran migajas.

Así que a nadie sorprenda si para mayo del próximo año, Felipillo madruga al magisterio y manda a los PEFEPOS antes de que siquiera organicen las protestas para el paro anual. Muy seguramente el sucesor de papá Vicente decidirá terminar en 15 minutos con el conflicto oaxaqueño y si le quedan más ganas de usar la fuerza, igual se echa a la guerrilla. Lo único cierto es que los profes y la APPO tienen casi perdida esta guerra contra el sistema, precisamente por hacerle el juego de asumirse como los Robin Hood y tratar de empujar desde afuera, cuando está comprobadísimo, que las revoluciones que triunfan se generan desde adentro.