La Guerra en ciernes (pt. 4)

Ya vamos casi por los seis meses y todavía no hay un rayito de esperanza (como diría el ex candidato López) que por lo menos medio nos haga vislumbrar una solución en Oaxaca. Entre el jueves y el viernes parecía que los profes podrían po0nerse de acuerdo para reanudar clases este mismo lunes; pero por obra y gracia de don Flavio Sosa, la consulta inicial fue reventada y ahora será entre este lunes y martes cuando se someta a nueva votación el regreso a clases y eso a ver, porque como están las cosas, ahora la consulta será controlada por la APPO, para que nadie se atreva a votar por volver a las aulas. Mientras tanto, Enrique Rueda está a punto de perder el control de la sección 22 del SNTE y con ello, su nidito de poder.

Y en el estado, las cosas no varían; dos homicidios en la semana (11 muertos a consecuencia del conflicto), las talibanas brigadas de vigilancia a cada rato quitan y ponen barricadas y durantre sus ratos de ocio, atrapan a gente en las calles (inocente o no) y los someten a juicio "popular". Sigue sin haber autoridad en Oaxaca y sin embargo,los senadores insisten en no desaparecer poderes, como si Ulises, el Congreso o los Jueces del tribunal estatal ejercieran de verdad. Lo verdaderamente necesario en este momento es de una vez permitir que por lo menos los niños puedan tomar sus clases de manera decorosa. Y para eso hay dos caminos: la rezonioficación total y por lo menos el exhorto presidencial a Ulises para que por el bienj de Oaxaca, deje el poder.